Desde 2005 el Senado proyecta cambios en el Servicio Meteorológico Nacional

La intención del Ejecutivo de pasar a la órbita civil el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) tiene su antecedente más cercano en un proyecto de ley presentado en agosto de 2005 por la senadora radical Amanda Isidori, que apunta fundamentalmente a jerarquizar y reorganizar al organismo. Para avanzar sobre el tema Isidori recibió hoy en el Senado al presidente del Centro Argentino de Meteorólogos, Juan Manuel Hörler.

Durante la reunión se coincidió en la conveniencia de que estos cambios se den por medio de una ley y no a través de un decreto. También, se adelantó que el tema se tratará en un plenario de comisiones a desarrollarse en las próximas semanas en la Cámara Alta. El Centro Argentino de Meteorólogos es la entidad que trabajó conjuntamente con Isidori en la elaboración de la mencionada iniciativa.

El proyecto de la senadora rionegrina constituye al SMN en un organismo civil descentralizado y con jerarquía de Dirección General, dependiente de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, bajo la órbita del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación.

De este modo, el servicio pasaría a tener una composición mixta, pues seguiría participando la Fuerza Aérea Argentina en todo lo relativo a la prestación meteorológica a la aeronavegación, pero no se acotarían las funciones únicamente a ello, habida cuenta del amplio margen científico de las actividades asignadas y su utilidad para otros rubros, en especial los económicos.

En el delineamiento de los objetivos planteados en el proyecto para el Servicio Meteorológico Nacional se busca: impulsar y consolidar la generación y aprovechamiento social de los conocimientos; difundir la prestación de los servicios de acuerdo a la diversidad de necesidades de todo el país; contribuir al bienestar social mediante el suministro de una base científica capaz de proteger el medio ambiente; y promover mecanismos de coordinación entre organismos vinculados con la meteorología, tanto en el orden nacional como internacional.

La iniciativa de Isidori propicia la derogación de la Ley 12.945/47, el Decreto-Ley 16987/66 y el Decreto PEN 2818/66, en cuanto normativas que legislan la actividad meteorológica en el nivel nacional.