martes, marzo 22, 2005

Homenaje a Ceferino Namuncurá

Al cumplirse un siglo del fallecimiento de Ceferino Namuncurá, la senadora Amanda Isidori impulsa desde el Senado de la Nación un homenaje y reconocimiento al joven mapuche, símbolo de devoción cristiana y popular de la región patagónica.
En su iniciativa, Isidori propone enviar a la localidad de Chimpay una placa de conmemoración del centenario de la muerte de Ceferino, con la inscripción: "El Honorable Senado de la Nación brinda su homenaje a Ceferino Namuncurá en el centenario de su muerte, y saluda a la comunidad de Chimpay, Provincia de Río Negro. Mayo de 1905 – Mayo de 2005".
El correspondiente proyecto de Resolución, también contempla que la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, que preside la senadora rionegrina, designe una comitiva de senadores que se constituirá en la localidad de Chimpay para hacer entrega de la placa a las autoridades del lugar, en los actos de conmemoración a realizarse en mayo próximo.
Isidori sostuvo que "el objetivo del proyecto es realizar un homenaje simbólico desde el Senado de la Nación, Cámara donde se encuentran representadas en el nivel nacional las provincias argentinas, a la comunidad de Chimpay, localidad originaria de Ceferino Namuncurá y centro de referencia de la comunidad religiosa que venera su obra".

miércoles, marzo 16, 2005

Isidori pide se mantenga el apoyo a INVAP

La senadora Amanda Isidori presentó un proyecto de comunicación solicitando al Poder Ejecutivo que mantenga el apoyo brindado hasta la actualidad y la participación de la empresa rionegrina de Investigación Aplicada Sociedad del Estado (INVAP S.E.) en el desarrollo tecnológico del Plan de Radarización Nacional.
La iniciativa surge a raíz de que la polémica abierta por la falta de controles contra el narcotráfico, desatada por el caso ocurrido en la línea aérea Southern Winds en las últimas semanas, afecta la disputa por el manejo de la última etapa de plan de radarización, que el INVAP estima posible de culminar en lapso de tres años.
Según trascendidos en los medios periodísticos, funcionarios del área de Defensa de la Nación admiten la existencia de presiones por parte de las principales firmas extranjeras del sector y sus respectivos representantes nacionales, que estarían pujando por hacerse cargo de esta segunda etapa del plan de radarización que prevé la generación de radares primarios o 3D.
El Plan de Radarización Nacional tiene como objetivo fortalecer aspectos vinculados a la seguridad de la navegación aerocomercial y la soberanía aérea nacional.

Choele Choel: obras en la Ruta 250

La senadora Amanda Isidori solicitó precisiones a las autoridades de Vialidad Nacional sobre el inicio de las obras destinadas a brindar soluciones al cruce de la Ruta Nacional 250 hacia el barrio Maldonado de la ciudad de Choele Choel, que ha sido durante años un sector de mucho riesgo para los vecinos que deben atravesar la citada vía para acceder al casco urbano.
Informó al respecto que "aunque cada año reiteramos el reclamo de forma urgente, a fin de evitar que se continúen produciendo los severos accidentes registrados en ese lugar, se nos comunicó que las obras se iniciarán en los próximos meses, aunque no sabemos a ciencia cierta la fecha".
"La respuesta a la solicitud es que ésta semana se lanzan a la venta los pliegos de licitación de las obras, entre las que se incluye las obras para el cruce de peatones, pero lo cierto es que a esta instancia le siguen una continuidad de tramitaciones administrativas que nos permiten asegurar que la solución para este problema no es inmediata" sostuvo la senadora.
Amanda Isidori estimó que se requerirán plazos para la evaluación de los pliegos; la presentación de las ofertas por parte de las empresas interesadas, el cierre del proceso de venta y evaluación de las ofertas; la elección de la mejor oferta y adjudicación de la obra a la empresa seleccionada; la firma del contrato de licitación que depende del Ministerio de Economía; la presentación y aprobación del plan de trabajo al Poder Ejecutivo, y finalmente la puesta en marcha de la obra.
Destacó sin embargo que el proyecto incluye, además del cruce de la ruta 250 en Choele Choel, otras obras en rutas nacionales de la provincia. El plazo total para la realización de la misma es de 18 meses, dentro de los cuales se realizarán los trabajos en Choele Choel.

lunes, marzo 14, 2005

Homenaje a Mariano Mores

El Senado distinguirá hoy con la "Mención de Honor Senador Domingo Faustino Sarmiento" al señor Mariano Mores en reconocimiento a la obra emprendedora lograda a través de su notable trayectoria artística.
El galardón será entregado por el señor Vicepresidente de la Nación, Daniel O. Scioli, y la Presidenta de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, senadora Amanda Isidori, en el Salón Azul del Congreso de la Nación.
Isidori señaló que Mariano Mores es "un hombre que ha marcado la historia cultural de nuestro país, aportando su talento en el arte de la música e innovando en el campo de la música popular y del tango en particular".
"A través de su obra, promueve el amor y el gusto por la música popular, cautivando en esta carrera no sólo a los músicos y el público en general, sino también a parte de su familia, que sigue sus pasos en el mundo de la música", agregó la senadora rionegrina.
En este sentido, y para finalizar, destacó "la importancia que han jugado en la carrera de Mariano Mores los lazos familiares, desde los inicios acompañado por sus padres y más adelante por su esposa, sus hijos y nietos".
En la ocasión de este homenaje el Maestro Mores y su sexteto interpretarán temas de su repertorio.

jueves, marzo 10, 2005

Isidori solicitó se traten en el Senado los proyectos que proponen la aprobación del Protocolo Facultativo de la CEDAW

La senadora Amanda Isidori solicitó durante la sesión de ayer de la Cámara Alta, preferencia con despacho de comisión para la próxima sesión, para el tratamiento de los distintos proyectos que proponen la aprobación del Protocolo Facultativo de la CEDAW.
Estos proyectos de aprobación del Protocolo de la Convención por la Eliminación de Toda Forma de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), coinciden con el reclamo largamente expresado por la amplia base de organizaciones de mujeres; y la demora de nuestro país en su aprobación, constituye un tratamiento discriminatorio respecto de otros tratados de Naciones Unidas cuyos protocolos ya han sido ratificados.
La Convención es un instrumento internacional de procedimientos de recepción, comunicación e investigación que tiene por objeto la construcción de un espacio jurídico en el que las ciudadanas puedan encontrar garantías para resguardo de sus derechos ante violaciones de que puedan ser objeto.
En diciembre de 2004 la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto del Senado, emitió tres dictámenes sobre los proyectos de aprobación del Protocolo. Por un lado, el de la mayoría, que aprueba el proyecto pero con reservas, ya que establece que la Argentina no reconoce la competencia del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer y que ninguna norma del Protocolo que se ratifica se podrá aplicar o interpretar violando los derechos humanos, en particular el derecho a la vida a partir de la concepción. Por otro lado, el dictamen de la primera minoría que lo aprueba sin reservas; y en oposición a ambos el de la segunda minoría, que aconseja su rechazo.
Por su parte, el Poder Ejecutivo fijó su postura al respecto cuando el 30 de diciembre de 2004 remitió al Senado su proyecto de Ley por el cual se aprueba el Protocolo Facultativo de la CEDAW sin considerar ninguna reserva.

martes, marzo 08, 2005

8 de Marzo: Día Internacional de la Mujer

Con motivo de conmemorarse hoy el Día Internacional de la Mujer, la senadora Amanda Isidori hizo extensivo su saludo a todas las mujeres, haciendo votos para que juntas puedan continuar trabajando para que en el futuro gocen de las oportunidades que sus capacidades merecen, y que "tengamos la serenidad y a la vez la firmeza para llevar adelante nuestras convicciones".
Isidori renovó, además, su disposición para trabajar conjuntamente en pos de los Derechos de las Mujeres y las Niñas, a los que señaló como el "objetivo que guía desde los inicios los ejes de mi labor social y política".
En lo referente a la labor parlamentaria, y en este marco de celebraciones, presentó un Proyecto de Declaración promoviendo el reconocimiento al valor histórico y la contribución colectiva de las acciones de las mujeres, a la historia e identidad de nuestro país.
En la fundamentación del mismo, y como ejemplo, Isidori rescata especialmente la labor de las mujeres durante la Campaña del Desierto.
Ilustrando la relación de la mujer con este suceso histórico a continuación se transcribe una nota de opinión de la senadora rionegrina, titulada “Historias de mujeres en estas tierras sureñas”.

lunes, marzo 07, 2005

"Historias de mujeres en estas tierras sureñas"

Recuperar las voces, presencias y acciones de las mujeres en nuestra historia no sólo es un justo reconocimiento a las miles de mujeres que contribuyeron al nacimiento y crecimiento de nuestra patria, sino una labor necesaria para saldar una herida aún abierta en nuestra identidad colectiva.
Las cronologías tradicionales están fuertemente impregnadas por una visión androcéntrica, ciega a las prácticas de las mujeres; sus identidades y acciones han permanecido por décadas sumergidas en el silencio y el olvido a pesar de haber sido parte de la historia de nuestro país desplegando una multitud de roles.
Muchos sucesos transformaron las relaciones sociales y políticas en nuestra historia, pero ninguno quizá sea tan controvertido como la tristemente llamada "Campaña del Desierto". Especialmente en nuestra querida provincia de Río Negro y en toda la Patagonia, pasado ya más de un siglo, se abre un profundo debate entre quienes sostienen que fue una epopeya que permitió consolidar el territorio nacional; y quienes afirman –no sin fundamento- que fue una matanza motivada en muchos casos por la codicia.
Pero más allá de este necesario debate, unos y otros olvidan que casi la mitad de las fuerzas de frontera fueron mujeres que dejaron todo para seguir a la milicia, viviendo el día a día, peleando y muriendo junto a los hombres.
No fueron pocas, llegaron a contar cuatro mil. Chusma, milicas, fortineras, cuarteleras; de ellas cuenta el expedicionario Eduardo Ramayón "Voluntariamente salían de su aldea o villa o pueblo para iniciarse en una vida que les era enteramente desconocida, importándoles muy poco las vinculaciones al sitio, las comodidades del hogar y los ruegos de las madres que quedaban profundamente estupefactas y a las que, a pesar del amor, el respecto y los rasgos de desesperación, definitivamente abandonaban... confiadas ya en el cariño entrañable al uniforme o a las fútiles promesas del voluntario, enganchado o destinado...".
Estas mujeres –¡cuando no!- se ocupaban de sostener la vida de cada día, eran bestias de carga, de transporte de enseres, armas y vituallas, cargaban leña y lavaban la ropa de sus compañeros. Ocupaban la retaguardia de las columnas con sus hijos a cuestas, si había un ataque peleaban a caballo junto con los hombres. Sus vidas eran muy duras, como toda compensación por su trabajo recibían raciones de alimento, cumplían con la disciplina militar, se las comisionaba para asistir a velorios, entierros y rezar en estas circunstancias "...por el alma del finado". Eran esposas, novias, madres, curanderas o prostitutas, algunas llegaron a vivir en fortines entre veinte y cuarenta años.
De ellas Manuel Prado nos dice "...Las mujeres de la tropa eran consideradas como fuerza efectiva de los cuerpos se les daba racionamiento y, en cambio, se les imponían también obligaciones… Eran toda la alegría del campamento y el señuelo que contenía en gran parte las deserciones. Sin esas mujeres, la existencia hubiera sido imposible. Acaso las pobres impedían el desbande de los cuerpos."
Las fortineras de la Campaña del Desierto no fueron las únicas, a lo largo de nuestro territorio estuvieron también en las guerras de la Independencia en retaguardia y en el campo de combate. Rescatamos las palabras de la santiagueña Manuela Godoy en su relato de la batalla de Tucumán "Aunque sea con agua y algún aliento a los hombres, algo se hace para ayudar a la patriada. Y si tengo que agarrar una bayoneta …no soy lerda ni me voy a quedar atrás".
En la campaña al Alto Perú la puntana Pancha Hernandez combatió de uniforme a pistola y sable y en el Ejército de los Andes también San Martín autorizó a las mujeres para que acompañaran a sus maridos.
¿Que pasó con ellas? En nuestro Sur, cuando todo terminó muchos sobrevivientes se quedaron en esas tierras, algunos recibieron parcelas en reconocimiento a sus servicios.
¿Y las mujeres? Las palabras del propio Ramayón nos cuentan como terminaron: mientras duró la Campaña "El gobierno las proveía de cierta porción del racionamiento que se asignaba al soldado, raciones modestísimas que más tarde, con la desaparición del indio, quedaron definitivamente suprimidas... Una vez que todo fue paz y fraternidad, porque habían terminado las guerras, la situación de las pocas sobrevivientes quedó completamente definida con la eliminación de las listas en que figuraban y su no - admisión en los cuarteles".
En este 8 de marzo, cuando en el mundo miles de mujeres y hombres cumplen con homenajes y se comprometen a continuar avanzando el camino de la equidad, vale recordar los nombres olvidados. El de la esclava negra Josefa Tenorio que combatió junto a Toribio Dávalos; Carmen Funes, rebautizada La Pasto Verde por la soldadera; la capitana Isabel Medina; la sargento primero mamá Carmen; la Viejita María; Mamá Culepina y Mamá Pilar; la Pastelera; y también la Pocas Pilchas, la Cama caliente, la Pecho´ e Lata, la Vuelta Yegua, cuyos apodos humillantes dan cuenta del lugar que les daba la soldadesca. Las mujeres del cabo Cardozo y del cabo Gómez, de las que no tenemos sus nombres pero sabemos que acompañaban la tropa embarazadas, y que la mujer del Cabo Gómez alumbró su hijo en el camino y apenas cortado el cordón umbilical continuó la marcha junto a la columna.
Ellas abrieron caminos para que mucho después, casi un siglo, las anarquistas y socialistas, inmigrante e hijas de inmigrantes empezaran a luchar cada una desde sus perspectivas ideológicas por los derechos civiles, políticos y sociales de las mujeres argentinas. Para que más tarde otras mujeres accedieran a la formación escolar secundaria y algunas –muchas menos- lo hicieran a la universidad. Para que Elvira López obtuviera su diploma de doctora en Filosofía; Cecilia Grierson, Alicia Moreau y Julieta Lantieri fueran médicas y una activista política socialista como Carolina Muzzilli tuviera reconocimiento internacional.
En las palabras de la escritora Mabel Pagano "Es un acto de justicia recatarlas del olvido y darles el lugar que ganaron, a fuerza de coraje, en la historia de la patria". Evocándolas restituimos en la memoria a todas las mujeres que, innombradas y silenciosamente, forman parte de nuestras identidades. Amanda Isidori.

jueves, marzo 03, 2005

Diálogos y desafíos de la responsabilidad política

Es un lugar común la afirmación según la cual cuando una figura política alcanza un espacio relevante suele olvidar los compromisos asumidos y las bases sociales a las que representa. Debemos esta afirmación a la desconfianza y descreimiento que se cierne sobre la clase política, muchas veces abonada -debemos admitirlo- por la propia acción de los políticos; pero también resultante de un proceso de fragmentación y disolución social, a la vez que de importantes cambios en los procesos tecnológicos, sociales y políticos que consolidan progresivamente la fuerza de la sociedad civil, de la que las y los políticos provenimos.
Es la tensión -pareciera inevitable- entre representantes y representados, el obstáculo en la construcción de un diálogo que parece condenado a la asimetría.
Las mujeres no escapamos a este juicio, sin embargo, una parte importante de nosotras aún sostiene con firmeza la convicción de que "muchas mujeres en política, cambian la política". Seguimos buscando el camino del diálogo, de ese diálogo difícil pero imprescindible; que a veces se ve obstaculizado por la resistencia natural a todo cambio que parece coexistir en los seres humanos con el afán de progreso.
Es un diálogo algunas veces concreto, escuchando, registrando, mirando las mujeres de mi provincia. Otras veces es un diálogo imaginario, en el que están presentes como interlocutoras de mis acciones; las que conozco, las que conocí y las muchas que no conozco y a las cuales igualmente debo mi trabajo.
Y pienso, y siento, que no es lo mismo para la acción política si se es mujer o si se es hombre. No son los mismos obstáculos, pero tampoco es igual el valor de los resultados, de los buenos y de los malos. Tanto las metas alcanzadas en temas de Género, como cada cuestión que queda postergada en espera del momento adecuado, están inspiradas y orientadas por y para otras mujeres.
Por eso, en suma, el énfasis puesto en ratificar el protocolo de la Convención Contra toda forma de Discriminación contra la Mujer. Nuestra Constitución Nacional incorporó esta Convención en la reforma de 1994, y dispuso la obligación del Congreso de la Nación de legislar "medidas de acción positiva que garanticen la igualdad real de oportunidades y de trato, y el pleno goce y ejercicio de los derechos reconocidos por esta Constitución y por los tratados internacionales vigentes sobre derechos humanos, en particular respecto de... las mujeres..." Lamentablemente, a pesar de todos los proyectos existentes al respecto, no se ha logrado el tratamiento de ninguno de ellos.
Esta, como otras metas pendientes, deben afrontar las barreras de aquellos para quienes la emergencia de las mujeres impone un peligro para el orden establecido.
Hablo de los fundamentalismos, los mismos que intentaron impedir la sanción de una ley de Derechos Sexuales y Reproductivos, los mismos que se oponen hoy al proyecto de Educación para la Sexualidad en las escuelas, los que ven amenazada la integridad de la familia cuando hablamos de violencia intrafamiliar o de abuso sexual de menores. Por eso el contrapeso puesto en estos temas a través de mis proyectos.
En suma, por eso el énfasis en prever que estos mismos fundamentalismos, cambiando de ropaje, apuntalen una reforma política que implique un retroceso sobre el logro del Cupo Femenino. Sabiendo que esto significaría una pérdida de difícil reparación para la salud de la democracia, de las instituciones y del difícil camino a recorrer en la visión de que "muchas mujeres en política, cambian la política". Amanda Isidori.