miércoles, noviembre 24, 2004

25 de noviembre: Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

En adhesión a la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la senadora Amanda Isidori consideró que “cada 25 de noviembre es una herida que aún duele pero es también el momento de renovar el compromiso inclaudicable de continuar trabajando para dejar atrás las ideologías tradicionales que refuerzan la dependencia y el sometimiento de las mujeres y reproducen en la sociedad el ciclo de la violencia. Y para asumir, con ferviente esperanza, la posibilidad de una tierra de paz y con vigencia plena de los Derechos Humanos”
Isidori destacó como positivo que Argentina haya suscripto tanto la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer firmado en Belem do Pará (Brasil) como a la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), y que cada año se sume al conmemoración de esta fecha.
Sin embargo, consideró que “todavía no hemos logrado erradicar este flagelo silencioso, verdadera guerra interna contra las mujeres que cobra cientos de víctimas cada día. Todavía no hemos logrado evaluar con amplitud la aplicación de las leyes de protección contra la violencia familiar, todavía la Ley Nacional 24.417 espera para ser actualizada y perfeccionada”.
El 17 de diciembre de 1999, a través de la resolución N° 54/134, la Asamblea General ha declarado el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, y ha invitado a los gobiernos, las organizaciones internacionales y las organizaciones no gubernamentales a que organicen en ese día actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública respecto al problema de la violencia contra la mujer.
Desde 1981, las militantes en favor del derecho de la mujer observan el 25 de noviembre como el día contra la violencia. La fecha fue elegida como conmemoración del brutal asesinato en 1961 de las tres hermanas Mirabal, activistas políticas de la República Dominicana, por orden del gobernante dominicano Rafael Trujillo (1930-1961).